martes, 30 de octubre de 2012

Un Flash de Séptimo Grado



El segundo punto algún circunstancial puso diferentes uno diferente ¡Yo! El tercer punto era obtener titulares y después clasificar. Hice así. ¿Está bien así? ¿Existe el circunstancial de duda? Yo dale, perfecto. Puede ser de modo también. ¿Prestan atención? Eran de un diario ¿Qué tipo? Si era de tiempo de modo, sí, por favor, Gabriela los titulares y le colocan, lo pegan. ¿Cómo? Si es de lugar de tiempo de fin sintácticamente como el sustantivo modificador directo, sí, está bien, señorita, ¿Puedo ir al baño? La industria minera mañana tienen que darlo. Adiós, mis amores y mi novio es chileno. ¿Se pueden apurar? Carolina, el objeto directo, lluvia, aumento de salario, ahora, sentate, Luciana. Yo ya no entiendo más qué perfecto, quizás. Era una broma, por ellos, con mi papá y mi mamá dijo que consiguió ella puede mandarlos a juntando una computadora para el colegio. ¿Qué dijo? Ja, ja, ja, ja, vos llevás diez latas te dan 1 peso ¿Una computadora? Dijo Bernie. ¿Cuántos? Eh, a ver, shh, la señorita. A vos, María Laura pero todo esto es un solo núcleo y todo es predicado, te vas a comer afuera, pero impedidas por el pronombre será anunciado. No no no, puede ser, será anunciado o a futuro será mejor cuando el sujeto está tácito, muy bien, Carolina Vera, ¿Qué estás comiendo? Nada, se lo juro, se lo juro. Perfecto, De Rosa falta la tercera porque van afuera, no se ubican, por favor, no se puede, hábilmente no los impido, pasalo a analizarlo así lo empiezan a hacer ahora por el baño para ponerte la nota, ja ja, nos tiene que decir la próxima es a nosotras, los presidentes, no no es por mi cumpleaños ¿Qué es lo que hay ahí abajo? Debe estar buscando el aro todavía, muy bien, Estefanía, muy cualquiera, Luciana, con las piernas para arriba, ¿ven qué sucede? Señorita, che, María Paz, liquid paper, señorita, no! lo analizás vos, ya terminamos, chau, Julieta, otra chau, se pudo pasar bien si había que pasarlo, analizan, le venció muy hábilmente lleva acento, ah, ¿qué sería? Yo lo analizo anuncio anunciados, gracias, Estefanía, por, señorita, ¿puedo ir al baño? Hacé el chorrito acá, por ahí es algo más sólido, María Paz, me duele la cabeza, ¡te sentás! Es un segundo, no te podés descuidar con Antonella predicado ¿Cómo? Esto lo corrigen y guardan todo.

domingo, 28 de octubre de 2012

Los Noventas no se Van

(Basado en hechos de la vida real)


-          Hola, Paz.
-          Qué hacías?
-          Nada, fisgoneando.
-          Sí, todo es fisgón. 
-    La aspiradora me succionó un repasador y casi me desmayo.
-          ¿Y qué pasó?
-          Tuve que desarmar el tubo.
-          Oh, qué horror.
-          Sí, sí lo es.
-          Yo hace rato hable con cierto sujeto cuyo más grande anhelo era ir de viaje por la latinoamericanidad toda. Me dijo que se va a Suecia y Finlandia. Fijate.
-          Ah, no… La gente desvaría. ¿Cuál es el problema con ser consistente?
-          No lo sé, Kari.
-          Yo no sé qué pasa con las personas. Uno sabe qué se le presenta, lo toma, lo usa para su satisfacción personal y se da cuenta de que al final todo lo que anunciaban era una vil mentira.
-          Claro. En cambio, los cassettes son el mejor e único ejemplo de como deberían ser las cosas. Vos leés la lámina adjunta, te anoticiás del contenido y lo escuchás sabiendo qué te espera. ¿Por qué la gente no puede ser así?
-          Porque la sociedad se volvió una cassettera desorganizada. Nadie tiene el rótulo correspondiente, hay gente sin caja por ahí. ¿Cómo hacés para saber qué te espera?
-          No hay chance, finalmente Sally Field tenía razón y la vida es en efecto como una caja de bombones, con el detalle que parece que compramos una muy mala, en la que solo vienen esos de cereza con licor y esa pasta simil banana que no sirve para nada, y uno continúa probando igual a ver si una UNA vez te toca el de dulce de leche por lo menos.
-          ¿Viste que volvió Luisa Albinoni al estrellato?
-          ¿Fuimos nosotras?
-          Todo indica que sí.
-          No nos cansamos de estar en lo cierto.
-          Hola, hola, Gladys?
-          Boluda, ¿Qué es eso?
-          ¡¿Se ligó?!
-          Qué noventoso…

sábado, 27 de octubre de 2012

No, Gracias



El otro día iba caminando por la calle y me topé con un mega cartel, un “espectacular”,  anunciando el  estreno de “El Vengador del Futuro”, (Total recall, USA 2012) con lo cual se me presentaron varios interrogantes. 

En primer lugar, ¿cuantos años pasaron desde  la original con Arnold Schwarzenegger? La respuesta es 22. Otra pregunta  fue ¿Ya? La respuesta es SI, ya. 

Otras preguntas  varias que se presentaron  fueron: ¿Colin Farell? ¿En serio?; y otra primordial fue ¿quién hizo el casting? porque la buena y la mala se parecen mucho, prestándose a confusiones varias.
Ahora bien, más allá de la costumbre hollywoodense de mandarnos remake tras remake,  de  nuestras  quejas  por qué no hay ideas, etc, vamos a  concentrarnos en hacer algo útil: una lista de remakes que nunca pero  nunca tendrían que suceder:
Weekend at Bernie´s o Fin de semana de locura, como se llamó por acá. ¿Qué otro actor puede hacer de muerto tan bien como ese señor? Nadie. Y un elemento fundamental de la película es la vestimenta ochentera de todos los personajes, un festival de pantalones tiro alto blancos y remeras en colores pastel, simplemente delicioso.
Volver al futuro.  Si bien no tendría que explicar nada acá, no voy a mencionar el carisma de Michael J. Fox, no voy a mencionar la banda de sonido, ni la dirección. Solamente voy a decir que el futuro nunca va a ser tan divertido como podía llegar a ser en los 80. Punto. Ahora que ya conocemos el Siglo XXI  y apesta, ¿cómo querer volver para acá?
Rocky. Rocky Balboa es Stallone. Los 70 ahí mismo, en tu cara, mirándote a través de los ojos del semental italiano, de la tímida Adrian en la tienda de mascotas. No se puede replicar, ni volver a contar. Esa historia pasó ahí en Filadelfia en los 70.
En combo: Reality Bites y Empire Records. Más allá de la obviedad de que ya no existen las disquerías en las cuales los jóvenes buscan el trabajo perfecto, hay cierta ingenuidad en las dos películas que ya perdimos.  Esa diferencia entre el yuppie y el bohemio parece vieja,  hoy ya no son tan distintos. Hoy Winona Ryder no tendría que elegir entre uno y otro por  que  ahora estamos todos mezclados.  También sabría de antemano que no es una buena idea acostarse con tu amigo que tiene una banda.




jueves, 25 de octubre de 2012

Nuestra Señora de la Santa Parecencia

Comunicación con el Vaticano- Vía Coaxil

 Sí, se apareció y nos dijo: soy vuestra señora de la santa parecencia. Dijo vuestra. Sí, porque aprendió castellano ibérico. Sí, hay estigmas, todo. Le mostramos si quieren. 

Nos reveló ciertas cosas que vamos a dejar en secreto hasta pasado mañana, y pasado mañana vamos a decir que no, que se los decimos la semana que viene para no afectar la integridad eclesiástica; porque hay cosas que no se pueden saber. Pero son secretos muy atemorizantes, eh? Las generaciones futuras no lo van a soportar. O pasa eso, o van a pensar: ¿Esto era? ¿Nada más? 

Sabemos que los pastorcitos de Fátima tenían una coartada mejor, y con las vestiduras rasgadas les dieron más pena. Pero nosotras no vamos a perder la dignidad, ni siquiera ante una aparición. Sí, claro que somos creyentes. ¿Duda de nuestra devoción? 

Básicamente, el mensaje es que el postre es marrón, las costuras de los jeans deben permanecer a los costados y sólo en la entrepierna, y que hay ciertos tipos de calzado que ofenden mucho a dios. Lo enfurecen. También nos explicitó cuáles son las características de los naipes y que ellos no verán el reino de lo cielos. 

¿Cómo se presentó? Con un manto, largo, y en su mano sostenía … un cassette. Creemos que hay que ofrendarle cassettes a nuestra señora para que nos ilumine con respecto a su santa parecencia. No sabemos si volverá a aparecerse, hará lo que más convenga a su parecencia celestial. Ora pro nobis.